Proyecto comisionado por Casa del Lago de la UNAM en colaboración con la artista Tania Candiani. CDMX, 2020
Tania, en un gesto amoroso y a manera de saludo cotidiano, le envió cada día a Erick, durante la cuarentena, un video con un ave cantando. Al paso de los meses, crearon un aviario digital, como un puente de comunicación entre ellos. Al mismo tiempo, como un gesto de supervivencia, parvadas de músicos llenaron el silencio que solamente ocupaban las ambulancias y las aves en las calles vacías de la Ciudad de México. Erick le propone a Tania conjuntar ambos gestos, poético y de resiliencia, para crear el primer ejercicio de “CAUTIVERIO”. En CAUTIVERIO II convocan en el bosque de Chapultepec a cinco músicos callejeros que interpretarán con sus instrumentos (acordeón, marimba, violín, saxofón y voz) los cantos de distintas especies de pájaros para dialogar desde el sonido.







